Por un Black Friday perpetuo

El pasado fin de semana tuvimos el honor de poder participar en el Black Friday. Este anticipo de las rebajas invernales no es nuevo en nuestro país, pero sí es cierto que este año hemos podido vivirlo con mayor plenitud. Justo cuando en Estados Unidos está perdiendo fuelle, el Black Friday arrasa en España. Colas quilométricas se pudieron apreciar en diferentes establecimientos, que amenizaban las compras hasta con descuentos de un 50%. La novedad de este año ha sido que el grupo Inditex también ha querido participar en este evento. Si bien es cierto que los descuentos no eran superiores al 20% no se abstuvo de promover sus prendas para no quedar rezagadas en el almacén guardando polvo. Lo que personalmente me hace reflexionar de todo esto es que vivimos rodeados de descuentos permanentes en cualquier gran superficie que visitemos. El éxito de cadenas low-cost como Primark sólo se explica por la feroz crisis que aún vivimos, culpable de hacer tanta mella en el bolsillo de los españoles. En una época donde prima el precio a la calidad aún podemos discutir la ética de comprar en el top manta? Yo no lo tengo muy claro, ahí os lanzo la pregunta.